Poner en marcha una nueva empresa es un proyecto que produce mucha emoción e ilusión. En la actualidad, además, no es necesario tener un local físico, sino que se puede iniciar una empresa directamente desde plataformas digitales.
No obstante, el trabajo previo que se debe realizar cuando estamos planteando nuestro modelo de negocio, es igual, independientemente de si se trata de una empresa física, digital o mixta tras la disrupción digital de los últimos años.
Será necesario tener en cuenta muchos factores: Número de empleados necesarios, estructura y, por supuesto, hacer un análisis de competencia.
Qué es un análisis de competencia
El análisis de competencia es un estudio que se hace, preferiblemente, antes de iniciarse en una aventura empresarial para conocer con detalle qué otras empresas están vendiendo los mismos productos o servicios que tú, cómo lo hacen y qué tal les va.
Saber quiénes son tus principales competidores es de vital importancia. No solo permite conocer la situación del mercado y bajar el ego de muchos que se creen que su producto es 100% único y original. También sirve para aprender de los errores que empresas más veteranas han cometido y ahorrarte el cometerlos tú con tu empresa.
Por qué hacer un análisis de competencia
Cualquier empresario con un mínimo de experiencia reconocerá la necesidad y utilidad de hacer un análisis de competencia exhaustivo antes de aventurarse a iniciar una empresa.
En el clima de mercado actual, es muy complicado pensar en un producto o servicio que sea 100% nuevo y original. Las probabilidades son que ya haya algo parecido en el mercado y que tu objetivo sea ofrecer algo mejor, no algo diferente.
Analizar la competencia te ofrece, en primer lugar, tener ejemplos a los que referir cuando estés diseñando tú propio proyecto. Esto te permitirá conocer a fondo cómo funciona el mercado al que quieres entrar, algunas de las estrategias que funcionan y otras que no, así como el valor del cliente que aportas tú con tu producto. El ahorro de tiempo, dinero y esfuerzo que lograrás será una gran ventaja cuando empieces.
Además, un buen análisis de competencia te descubrirá otras oportunidades de negocio en las que quizá no habías pensado, necesidades que no están siendo cubiertas.
Cómo hacer un análisis de competencia efectivo
Para poder hacer un buen análisis de competencia que sea útil para plantear tu propio proyecto de negocio debes empezar por plantearte una serie de preguntas:
- ¿Qué empresas son tu competencia? ¿Qué empresas podrían convertirse en tu competencia en el futuro?
- ¿Cuánto tiempo llevan funcionando? ¿En qué posición se encuentran?
- ¿Qué volumen de ventas tienen?
- El producto o servicio ¿es de calidad? ¿Cuál es el precio?
- ¿Qué estrategias están empleando?
Además de estas preguntas, es conveniente hacer también un Análisis DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) de las empresas que estén en competencia directa contigo, puesto que te ayudará a plantear el tuyo propio.
Utilizar la tecnología a tu lado para este análisis es fundamental.
Quién es tu competencia
Llegados a este punto del análisis, es importante conocer quiénes son los agentes que pasan a formar parte de nuestros competidores. En esta línea, puedes diferenciar entre dos tipos de competencia:
- Competencia directa: Serán las empresas que venden los mismos productos o servicios que quieres vender tú. Por ejemplo: Si quieres entrar en el mercado de la higiene femenina y vender compresas, la competencia directa serán todas las demás empresas que también vendan compresas.
- Competencia indirecta: Estas empresas no venden el mismo producto o servicios sino una alternativa al que tu ofreces, pero se dirigen al mismo público que tú. Utilizando el mismo ejemplo anterior, en este caso tu competencia indirecta serían empresas que venden, por ejemplo, copas de silicona.
Un error muy común al analizar la competencia es olvidarse, precisamente de las empresas de la competencia indirecta. Otro error muy típico es intentar analizar a todas las empresas en lugar de hacer una selección de las más destacables. Perderás demasiado tiempo en analizarlas todas, especialmente si el sector es muy amplio, como ocurre con la digitalización del sector alimentario o la digitalización del sector farmacéutico.
Consejos para hacer un análisis de competencia efectivo
La clave de un buen análisis de competencia está en la observación. Tendrás que observar al detalle a tus competidores, tanto en sus estrategias online como offline para poder tener una imagen clara de su modelo de negocio y su situación.
- Define y analiza bien los aspectos más importantes: Los servicios o productos que venden (obviamente), sus precios, sus proveedores, su volumen de ventas, sus recursos y número de empleados y si tienes acceso, sus cuentas anuales.
- Visita sus tiendas físicas y oficinas si es que las tienen. Estudia cómo disponen el producto y el “look&feel” que tienen.
- Observa como trabajan los empleados, el reparto de tareas, cuánto son y cómo se comunican con los clientes.
- Analiza su radio de acción.
- Visita su sitio online y toma nota de si coincide con el “look&feel” de los espacios físicos o si son diferentes. Analiza la estructura de la página y toma nota de su presencia online. Estudia el contenido que ofrecen, las posibilidades de comunicarse con ellos, etc.
- Comprueba su presencia en redes sociales, la estrategia que emplean, el tono de comunicación y la frecuencia de publicaciones.
Conclusión
En definitiva, toma nota de todas las fortalezas y debilidades que puedas encontrar en cada uno de estos apartados.
El análisis de competencia es crucial al inicio de una empresa, pero también es importante estar al tanto de las nuevas empresas competidoras que puedan ir surgiendo. Por ello deberías contar con las mejores herramientas digitales a tu disposición para hacer un análisis de competencia efectivo y útil para impulsar tu negocio.
